Desde la Tancada migrante salimos en bloque crítico hacia la Manifestació per l’alliberament LGTBI para exigir la derogación de Ley de Extranjería racista y colonial, en contra del capitalismo y del racismo que se repite también dentro del movimiento LGTBIQ+ euroblanco.
No nos olvidamos que fue la expansión colonial europea la que impuso las primeras regulaciones y leyes de prohibición de la homosexualidad y la multiplicidad de expresiones de género, usando el género y la sexualidad como tecnologías para clasificar a lxs sujetos colonizados y organizar su posterior control, reeducación y genocidios. Las huellas de esas historias de aniquilación y desposesión permanecen, así como sus vínculos con la política sexual y de género global actual.
El racismo, la homofobia, la lesbofobia y la transfobia están imbricadas en el sistema discriminatorio colonial capitalista que promueve el libre mercado y el extractivismo para sustentar las sociedades occidentales. Así es como Occidente ha colonizado el mundo y lo sigue haciendo hoy a través de sus políticas de muerte, levantando muros y fronteras, cárceles CIEs, impulsando leyes de extranjería, organizando redadas y deportaciones, priorizando el libre mercado en vez de la libertad del movimiento de las personas. Fomentando las guerras como una forma de acumulación de la riqueza, lucrándose con la venta de armas y matando con la indiferencia y sus políticas racistas a millones de desplazadxs.
En este contexto denunciamos:
1. Las políticas de la Europa Fortaleza y como ésta gestiona la situación de las personas migradas y refugiadas, a través de la inclusión/exclusión jerárquica, el establecimiento de jerarquías del estatuto de ciudadanía y la multiplicación de fronteras internas que son constitutivas de la división de trabajo a nivel global. Estos procesos brutales de selección de personas migradas en términos de categorías raciales, de clase, de género, sexuales, religiosas, nos construyen como subhumanxs diferenciadxs a través de diversos procesos de deshumanización.
2.El sistema de asilo que esta paralizado e ineficiente: las personas migradas y refugiadas están atrapadas en sus caminos, detenidas en varios campos y centros fronterizos, encontrándose en situación de abandono sistemático e intensificados procesos de discriminación racial.
3.Europa de campos de concentración, de fronteras selladas, militarizadas, de muros y vallas alambradas y cada vez más sofisticado sistema de control.
4.La falta de derechos para las trabajadoras sexuales, la criminalización del trabajo sexual en la Europa Fortaleza, donde se aplican las medidas abolicionistas apoyadas por la derecha y la socialdemocracia en todo el continente. El nuevo gobierno que querrá implementar, como ya esta pasando en Barcelona con el grupo municipal del PSC, una ordenanza para aplicar medidas similares a las de Suecia, Francia, Noruega, Islandia e Irlanda, que han demostrado ser totalmente inútiles para combatir la trata y sólo han conseguido poner en mayor peligro a las trabajadoras sexuales más vulnerables, el aumento de las redadas racistas, la violencia basada en las leyes de extranjería y subsecuentes detenciones en CIEs y deportaciones.
5.La complicidad y el papel del movimiento LGTBIQ+ euroblanco en el expansionismo imperialista colonial, sus guerras y misiones civilizatorias.
La reproducción de la geopolítica del tiempo colonial capitalista, que sitúa LGTBIQ+ como una medida de democracia, progreso y modernidad, mientras nos relega al status de “otrx(s) no europexs”, nos excluye y posiciona inevitablemente como pertenecientes al pasado heteropatriarcal que debe superarse.
Imaginarios y prácticas trans y homonacionalistas que participan en la construcción de la Europa Fortaleza.
Estos procesos hegemónicos no solo crean divisiones de género y sexualidad, sino que también institucionalizan las diferencias racializadoras entre lxs LGTBIQ+ blancxs y personas sexo-género disidentes racializadas, migradas y refugiadas.
6. Nos oponemos a ser fichadxs para que sus proyectos cumplan con las cuotas, parezcan menos problemáticos, sus eventos y festivales menos blancos, y sus guerras menos imperialistas!
7. Denunciamos las formas de despolitización a través de lemas y campañas de pinkwashing, que usan la situación de las personas migradas y refugiadas para limpiar su imagen, sus egos y su culpa europea, como lo estamos viendo con la convocatoria del Pride Barcelona 2018. Aquí no hay una solidaridad queer sino el capitalismo colonial del arcoíris.
Quienes estamos en el “umbral de la ciudadanía” debemos organizarnos en un frente común de resistencia ante este sistema heteropatriarcal colonial capitalista que extrae recursos, promueve y financia guerras en nuestros países y que trata como criminales a quienes huyen de los conflictos y la pobreza hacia el así llamado “primer mundo”. Unidxs contra este sistema binarista y racista que no permite otras experiencias y expresiones sexogenéricas, las que no se amolden a la heteronorma y homonorma del capital. Unidxs contra la pobreza y la vulneración de derechos de miles de personas migradas y refugiadas, ya sean temporeras, trabajadoras del hogar y cuidados, kellys o trabajadoras sexuales.
En Solidaridad con las compañeras marroquíes de Huelva!
No nos vamos a callar, porque lo queer no te quita lo racista!
El Orgullo será antirracista o no será!